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| Los Huskies de UCONN son los nuevos monarcas del Baloncesto NCAA división I. |
Por Sergio Morales
He sido un fanático más de Shabazz Napier desde que llegó al
baloncesto colegial NCAA en el 2010 y logró el título junto a Kemba Walker y Jeremy
Lamb (ahora jugadores NBA) pero para ser sincero tengo que reconocer que no
estaba en mis pronósticos que vencieran a Villanova en la tercera ronda del
torneo nacional este año, por consiguiente no esperaba que también derrotaran al
poderoso equipo de Iowa State en los Dulces 16. A pesar de la contundente
victoria contra los Cyclones me parecía muy poco probable que borraran de la
cancha a Michigan State en el Elite de los 8 sobre todo con el enorme talento
de los Spartans. La contundente victoria ante los Gators en el
Final Four fue un golpe de autoridad sin duda y un aviso de lo que se venía, la
clara reafirmación de que los Huskies son el mejor equipo universitario del
2014 tras vencer a los Kentucky Wildcats por 60-54 para conseguir el título
Nacional del Baloncesto NCAA división I.
Para hacer todavía más meritorio este triunfo hay que
recordar que después del campeonato conseguido en el año Freshman de Napier
(2010-2011) UCONN se vino abajo estrepitosamente. Los Huskies eran amplios
favoritos al bicampeonato en el 2012 y sin embargo quedaron eliminados
sorpresivamente en la primera ronda. En
el 2013 fueron castigados con un año sin competir en el Torneo Nacional por
sanciones de reclutamiento lo que sembró
muchas dudas en la continuidad del boricua en el equipo tras su año Junior y no
solo de él sino del resto de sus compañeros ante el futuro incierto de su
escuadra.
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| Napier fue el gran lider del equipo para los Huskies. |
Además de los problemas ya mencionados, el coach Jim Calhoun
(para muchos el mejor de todos los tiempos en el baloncesto universitario) se
retira del programa y deja su lugar a Kevin Ollie un ex alumno de UCONN de 13
temporadas en el baloncesto profesional de la NBA. Gracias a las insistencias
de su madre y de sus coaches, Shabazz decidió quedarse en el equipo para jugar
su temporada Senior y desde el primer juego de la temporada demostró que venía
por todo en la campaña pero a pesar de las grandes actuaciones de Napier y sus
compañeros, los Huskies no eran este año los grandes favoritos al título pues
ocupaban la posición No. 18 del ranking nacional con 26 partidos ganados y 8
perdidos muy lejos de equipos como Florida con solo una derrota o Wichita State
con temporada invicta. Ni que decir de los usuales DUKE, Michigan State, Kentucky,
Ohio State o Michigan, todos ellos parecían equipos de otro nivel.
Los Huskies llegaron al torneo como el No.7 de la Región
Este y uno a uno fueron venciendo a cada uno de sus oponentes, todos ellos
mejores rankeados a excepción de Saint Joseph´s (No.10) quien fue su primer
rival. Por momentos daba la impresión que Napier y los Huskies disfrutaban el
ser “no favoritos” y lo tomaban como una motivación extra para darles a cada
uno de sus oponentes y a todos los expertos una lección de verdadero
baloncesto.
Napier demostró que es un jugador NBA participando en el
baloncesto colegial, este chico ya está para retos más grandes. De la forma en
la que manejó los tiempos del encuentro, como rompía las defensas como estaba
uno o dos pasos adelantado en los pensamientos y reacciones de todos los
jugadores en la cancha (de ambos equipos). Fue muy claro durante todo el torneo
quien es un jugador totalmente hecho y quienes son chicos con gran talento pero
aún en formación.
Con esta temporada termina la aventura universitaria para el
sensacional armador boricua a quien seguramente veremos enfundado en una casaca
NBA la siguiente temporada.
Solo para los récords, en su último partido universitario
Shabazz Napier jugó por espacio de 39 minutos en los cuales encestó 22 puntos,
capturó 6 rebotes, repartió 3 asistencias y robó 3 balones. Fue el mejor de su
equipo en puntos y rebotes y fue el máximo anotador de ambos conjuntos.
Ryan Boatright le siguió con 14 puntos y Niels Giffey con
10.
Por parte de Kentucky James Young fue el mejor con 20
incluída una espectacular clavada que se llevó la noche a pesar de la derrota
de su equipo. Julius Randle encestó 10 puntos y no fue el mejor de sus
partidos.
